La "jugada" de Motocard que mosquea a sus clientes: "Mismo modelo, distinto precio"
Ahora que se acercan las Navidades, muchos moteros ya están afinando la lista de deseos para Papá Noel. Cascos, guantes, botas o, especialmente, chaquetas de moto suelen estar entre los regalos más buscados. Sin embargo, en plena campaña navideña, una práctica comercial de Motocard está generando mosqueo entre numerosos clientes, pese a ser completamente legal.
El problema del stock y los precios desiguales
Motocard es una de las cadenas de referencia en equipamiento para motoristas en España, pero no es la primera vez que arrastra problemas de stock. En las últimas semanas, varias quejas de clientes han puesto el foco en una situación concreta: el mismo modelo de chaqueta se vende a precios muy distintos según la talla.
Para comprobarlo, nos hemos pasado recientemente por la tienda de Motocard en Madrid, centrándonos en cazadoras y chaquetas de moto. Y lo que cuentan muchos usuarios no es una exageración.
Misma chaqueta, precios muy distintos
La práctica es clara. Motocard ofrece el mismo modelo de chaqueta a precios sensiblemente más bajos cuando se trata de tallas poco habituales, como XS o XXL. Sin embargo, cuando el cliente busca una talla estándar, como L o XL, el precio sube de forma notable.
Esto no se limita a un caso aislado. Hemos visto diferencias llamativas en modelos como la Dainese Razon 2 de mujer, donde las tallas menos demandadas aparecen con descuentos muy agresivos, mientras que las tallas más comunes se mantienen —o incluso suben— respecto al precio habitual. Algo similar ocurre con algunas cazadoras de ByCity, donde la talla condiciona claramente el precio final.
Legal, pero difícil de digerir
Conviene dejarlo claro: no se trata de una práctica ilegal. Las tiendas pueden fijar precios distintos en función del stock disponible, la rotación de producto o la estrategia comercial. Cuando una talla se vende poco, bajar el precio es una forma lógica de liberar almacén.
El problema llega desde el punto de vista del cliente. Muchos motoristas sienten que están pagando un “sobreprecio” simplemente por usar una talla normal, lo que genera una sensación de trato desigual. Más aún en fechas navideñas, cuando muchos compran con prisa o como regalo y no comparan tallas alternativas.
La percepción del consumidor
El malestar no nace tanto del descuento en las tallas raras, sino del contraste directo. Ver la misma chaqueta, con idénticos materiales y protección, a decenas de euros menos solo por cambiar de talla provoca desconfianza. Algunos clientes incluso interpretan que el precio “real” es el más bajo y que el resto está artificialmente inflado.
Este tipo de situaciones afecta especialmente a marcas reconocidas como Dainese o ByCity, donde el cliente espera una política de precios más homogénea.
Un consejo antes de comprar
De cara a estas Navidades, el consejo es claro: comparar precios por talla, tanto en tienda física como online. En algunos casos, una diferencia de talla puede suponer un ahorro importante, y en otros, confirmar que estás pagando más simplemente por pertenecer a la mayoría.
Motocard no está haciendo nada fuera de la ley, pero sí se enfrenta a un problema de percepción y confianza. En un sector donde la fidelidad del cliente es clave, este tipo de prácticas, aunque habituales en el comercio, no siempre se entienden bien entre los motoristas.
Porque cuando se trata de equipamiento de moto, muchos aceptan pagar por calidad, pero no tanto por llevar una talla “normal”.