Se deja un dineral en una BMW S 1000 RR y cuando da tirones le dicen que "igual no sabe cambiar de marcha"

La BMW S 1000 RR es una de las motos más codiciadas y apreciadas por los fanáticos de las motocicletas deportivas, con su imponente motor y su increíble tecnología. Sin embargo, un propietario de una BMW S 1000 RR 2025 ha compartido su experiencia con una serie de problemas mecánicos y la falta de solución por parte de la marca, que ha dejado un sabor amargo en su experiencia con la moto.
Un comienzo problemático desde el primer kilómetro
La historia comienza en junio de 2025, cuando el propietario adquiere su BMW S 1000 RR nueva de paquete. Con apenas 1 km de autonomía, el cliente se dirige a la gasolinera para llenar el tanque, pero en el camino, la moto comienza a dar un tirón. A los 19 km, la moto muestra un fallo de motor, lo que lleva al propietario a llevarla rápidamente al taller oficial de BMW.
¿Una falsa alarma o un problema real?
En el taller, le dicen que no es nada grave, que el fallo desapareció por sí solo y que el problema no tiene mayor importancia. Sin embargo, los problemas no terminan ahí. Desde ese momento, la moto sigue dando tirones al cambiar de marcha, lo que genera incomodidad y preocupación en el propietario, quien inicialmente pensó que podría ser debido a la limitación del motor durante el rodaje.
A pesar de haber completado el rodaje de los 1,000 km, la moto sigue con los mismos problemas, por lo que se le hace un nuevo mapeado. A pesar de esto, los tirones persisten, lo que lleva a una nueva visita al taller. Esta vez, la respuesta del personal del taller fue bastante desconcertante: "El problema podría ser tuyo, ya que no sabes cambiar de marcha."
Frustración creciente: más visitas al taller sin solución
Con la moto aún en mal estado, el propietario decide llevarla una vez más al taller para intentar encontrar una solución definitiva. Le piden hacer una prueba a mayor velocidad, ya que las pruebas anteriores solo se habían realizado a 50 km/h. Después de esta nueva prueba, el taller admite que tiene razón, y el problema persiste.
Lo peor de todo es que la respuesta del taller fue aún más frustrante: BMW les pidió que probaran otra moto con características similares, pero como no había otra moto disponible en la ciudad, el propietario se queda sin moto durante todo el verano, sin saber qué hacer.
El riesgo de caídas y el impacto en la experiencia
Durante todo este tiempo, el propietario ha tenido que lidiar con los tirones constantes de la moto, lo que ha supuesto un riesgo real de caída en varias ocasiones. A pesar de que lo ha comunicado al concesionario, no le han dado ninguna solución efectiva, dejando que la moto siga funcionando con el mismo problema, lo que ha generado una gran frustración.
La conclusión: ¿Una moto defectuosa o una falta de respuesta por parte de BMW?
El relato de este propietario deja en evidencia la falta de respuesta adecuada por parte del concesionario y la marca BMW, que no ha resuelto el problema de manera satisfactoria. A pesar de las múltiples visitas al taller y los intentos de solucionar los fallos, el propietario sigue sin disfrutar de su moto, enfrentando riesgos y molestias innecesarias.
La BMW S 1000 RR es una moto de alto rendimiento, y la calidad de los productos de la marca generalmente es reconocida. Sin embargo, este caso pone en duda la atención al cliente y el servicio postventa, un aspecto fundamental en la relación con los clientes. Si bien puede haber factores externos que hayan contribuido a esta situación, es claro que el propietario se ha sentido desamparado ante un problema técnico que no ha sido resuelto de manera efectiva.
La situación de este propietario deja claro que la experiencia de compra y servicio no siempre es la que se espera, y que la atención postventa debe ser una prioridad para todas las marcas, especialmente para una moto de la categoría de la BMW S 1000 RR.