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KTM crece a lo bestia en MotoGP y ya corre más que Ducati

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Durante las últimas temporadas, Ducati ha marcado el ritmo en MotoGP de una forma casi incontestable. Los títulos hablan por sí solos: Pecco Bagnaia se proclamó campeón en 2022 y 2023, Jorge Martín logró la corona en 2024 con el Pramac Racing, y Marc Márquez cerró el ciclo triunfal en 2025. Cuatro campeonatos consecutivos para la marca de Borgo Panigale que han situado a Ducati como la referencia absoluta del paddock, proyectando una sombra alargada sobre el resto de fabricantes.

Sin embargo, el campeonato de 2025 ha dejado una sensación nueva. Ducati sigue siendo fuerte, sigue teniendo al piloto más determinante de la parrilla, pero ya no parece tan inalcanzable. El esfuerzo del resto de fábricas empieza a notarse, y la igualdad técnica comienza a asomar de forma clara.

Aprilia, el rival que más ha crecido

Si hay una marca que ha dado un paso adelante evidente en 2025, esa ha sido Aprilia. Y lo más llamativo es que lo ha hecho pese a tener a Jorge Martín lesionado durante buena parte de la temporada. La responsabilidad deportiva recayó casi por completo sobre Marco Bezzecchi, y el italiano respondió con resultados y regularidad.

Hay un dato que resume bien el momento de Aprilia: cada vez que Pecco Bagnaia se iba al suelo, Bezzecchi aprovechaba para ganar, incluido el último Gran Premio del año en Valencia. No es una casualidad, es la señal de una moto cada vez más competitiva y de un piloto capaz de capitalizar cualquier oportunidad.

Eso sí, en términos de velocidad punta, la RS-GP no ha sido la referencia del campeonato. La velocidad máxima de Aprilia en 2025 se ha quedado en 333,40 km/h, un registro muy sólido, pero no el más alto de la parrilla.

KTM, velocidad pura y un proyecto en transición

En el apartado de velocidad máxima, la marca que ha liderado MotoGP en 2025 ha sido KTM, con 333,62 km/h, el mejor dato del año. La temporada de los austriacos ha sido irregular, marcada por altibajos deportivos y por un cambio estructural importante: Hervé Poncharal dejará de dirigir el KTM Tech3.

Pese a ello, KTM tiene un nombre propio sobre el que construir el futuro: Pedro Acosta. El piloto de Mazarrón ha cerrado el año con cinco podios y un cuarto puesto en la clasificación general, consolidándose como la gran amenaza de futuro. Si la RC16 da un paso más en 2026, Acosta apunta a ser uno de los protagonistas absolutos del campeonato.

Ducati ya no domina todos los registros

Uno de los datos más reveladores del año es que Ducati ha sido solo la tercera marca en velocidad máxima media en MotoGP 2025. Su registro se ha quedado en 332,85 km/h, por detrás de KTM y Aprilia. La diferencia es mínima, pero simbólica: por primera vez en años, dos fabricantes han superado a Ducati en un apartado clave.

También hay que contextualizar el dato. Marc Márquez se perdió la parte final de la temporada por su lesión en Indonesia, lo que puede haber influido en la media global. Además, Ducati seguirá contando con él en 2026, un factor que, por sí solo, sigue inclinando la balanza.

Honda vuelve a respirar

En Honda, el balance de 2025 es sorprendentemente positivo. La marca del ala dorada ha sido cuarta en velocidad máxima, con 331,21 km/h, y ha cerrado el año con sensaciones mejores que en temporadas anteriores.

El séptimo puesto de Luca Marini en Valencia ha permitido a Honda mejorar su estatus en el sistema de concesiones, pasando del nivel D al nivel C. Esto reduce ciertas libertades técnicas, pero es una señal clara de progreso. Además, el papel de Aleix Espargaró como piloto probador refuerza la idea de que el proyecto empieza a encontrar un rumbo más definido.

Yamaha, el gran dolor de cabeza

El caso más preocupante sigue siendo Yamaha. En 2025 no han conseguido dar el salto esperado, mantienen las mismas concesiones y, además, han sido la marca con menor velocidad máxima del campeonato: 330,62 km/h.

Las esperanzas de la fábrica japonesa están puestas en 2026, con el desarrollo del motor V4 y el rendimiento que pueda extraer Fabio Quartararo antes del gran cambio reglamentario previsto para 2027. De momento, Yamaha sigue un paso por detrás del resto.

Un campeonato cada vez más abierto

MotoGP 2025 ha confirmado algo que llevaba tiempo gestándose: la brecha técnica se está cerrando. Ducati sigue siendo la referencia, pero Aprilia y KTM ya compiten de tú a tú, Honda empieza a levantar la cabeza y Yamaha busca una salida técnica a su crisis.

Con Marc Márquez aún en Ducati y jóvenes como Pedro Acosta llamando a la puerta, 2026 se presenta como una de las temporadas más imprevisibles de los últimos años. La hegemonía de Ducati no ha terminado, pero por primera vez en mucho tiempo, ya no parece eterna.