Reprograma su BMW R 1250 GS y pilla los 250 km/h: "Está limitada de fábrica"

Lo que muchos sospechaban ha sido confirmado por un taller especializado: la BMW R 1250 GS viene limitada de fábrica. En Upgrade Systems, un centro de referencia en preparaciones electrónicas, han explicado cómo esta maxitrail de referencia esconde mucho más potencial del que entrega de serie, y han detallado cómo se puede desbloquear todo su rendimiento con una intervención precisa y meticulosa.
Limitadores de torque: la jaula invisible
Según explican los técnicos del taller, los verdaderos culpables del "freno" en el rendimiento de la GS son los limitadores de par motor programados de serie en la centralita. Estos limitadores, implementados por razones de confort, seguridad y normativas, restringen el empuje real de la moto en ciertos rangos de revoluciones y marcha.
El primer paso para liberar a la 1250 GS de esas ataduras es precisamente reprogramar la centralita para eliminar esas barreras electrónicas. Una vez hecho, la moto empieza a comportarse con mucha más libertad, especialmente en la franja media del cuentavueltas, donde el motor bóxer da lo mejor de sí.
Acelerador más vivo y mezcla optimizada
Tras eliminar los límites de torque, el equipo de Upgrade Systems se centró en afinar la respuesta del acelerador, haciendo que la moto reaccione de forma más ágil y directa a cada giro del puño. Esto no solo mejora la aceleración, sino también la sensación de conexión con la moto, especialmente en curvas cerradas o al salir de un adelantamiento.
La última pieza del puzzle es la optimización de la mezcla de aire y combustible, lo que permite sacar el máximo rendimiento sin comprometer la fiabilidad. Gracias a estos ajustes, la R 1250 GS no solo corre más, sino que lo hace de forma más lineal, suave y potente.
Resultados que impresionan: 250 km/h en banco
Con todo este trabajo completado, la BMW R 1250 GS fue subida al banco de potencia, y el resultado fue tan espectacular como previsible: la moto alcanzó sin esfuerzo los 250 km/h, muy por encima de las cifras que ofrece de serie.
Además, la ganancia en cifras objetivas fue contundente: +10 Nm de par motor y casi 10 caballos adicionales. En una moto ya potente, este salto convierte a la GS en una auténtica bestia capaz de enfrentarse a cualquier escenario con más contundencia que nunca.