Un abogado cree que Protección de Datos podría sanciona a la DGT por la baliza V-16: "¿Cómo me van a geolocalizar?"
La iniciativa impulsada por el abogado Raúl Castañeda para frenar la obligatoriedad de la baliza V-16 continúa creciendo, y su mensaje se está viralizando entre conductores que comparten inquietudes económicas y de privacidad. En la presentación de la reclamación, Castañeda explicó que el segundo punto del documento solicita directamente que la DGT suspenda la obligación y que el organismo eche atrás la medida el 1 de enero.
Para el abogado, el coste del dispositivo es también un motivo de preocupación para miles de familias. Recordó que “son 40 euros la luz”, un precio que considera innecesario y que, sumado a la obligatoriedad, convierte la medida en una carga económica injustificada. De ahí su postura tajante: “Si podemos evitar que la gente lo compre, es lo que solicitamos”, dejando claro que su estrategia combina la vía administrativa con una movilización social que busca hacer presión.
La privacidad, el punto más delicado
Más allá del coste, el tercer punto de la reclamación se centra en uno de los aspectos más sensibles de la baliza V-16: la geolocalización. Castañeda exige saber “cómo me vas a geolocalizar” y qué uso se hará de los datos que recopilará este dispositivo. El abogado advierte que este asunto podría abrir un frente mayor, afirmando que “la Agencia de Protección de Datos no son amigos vuestros”, en referencia a la DGT.
Su mensaje apunta directamente a la gestión y protección de los datos personales, un territorio que suele despertar recelo entre los ciudadanos y que podría desencadenar un escrutinio más profundo por parte de las instituciones encargadas de velar por la privacidad.
La fuerza del movimiento depende de la participación masiva
Castañeda sostiene que la clave de esta iniciativa reside en la participación masiva. Según expone, si un gran número de ciudadanos envía reclamaciones, tanto la DGT como la Agencia Española de Protección de Datos se verán obligadas a pedir explicaciones y a revisar los argumentos que sustentan la medida. En sus palabras, si la respuesta es contundente, Protección de Datos también acudirá a la DGT para solicitar transparencia sobre el tratamiento de la información personal vinculada a la baliza V-16.
La propuesta ya circula entre usuarios que ven en esta obligatoriedad un coste añadido, una norma poco clara o una potencial intrusión en su privacidad. Castañeda busca convertir ese malestar en un movimiento organizado capaz de forzar a las instituciones a dar explicaciones y replantear la medida.
La batalla, tal y como plantea el abogado, acaba de empezar. Y para él, el resultado dependerá de cuántas personas decidan alzar la voz.
@anntonyardillo ZASCA DEL GRAN PREICANO , RAUL CASTAÑEDA A LA BALIZA V16 , DIGAMOS NO A ESTA IMPOSICIÓN GEOLOCALIZABLE
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