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Se tira un año con una BMW S 1000 RR y dice lo que le ha costado: "¿Es prohibitivo?"

El escape en la BMW S1000RR
El escape en la BMW S1000RR

¿Mito o realidad? La leyenda urbana de que mantener una BMW deportiva es prohibitivo se enfrenta a la prueba más sencilla y transparente: los números reales de un usuario tras su primer año con una BMW S 1000 RR. Con 9.000 kilómetros recorridos y un año de uso, este motero ha compartido todos los costes reales de mantenimiento, recambios y problemas vividos. Y sí, también ha lanzado alguna que otra pulla a su concesionario.

Primera revisión: desbloqueo de la ECU y aceite

La primera revisión, obligatoria tras el rodaje, le costó 168 euros. Incluyó el desbloqueo de la ECU, eliminación de la limitación de revoluciones, cambio de aceite y filtro de aceite.

Un precio razonable teniendo en cuenta que se trata de una deportiva de altas prestaciones, y que este primer mantenimiento marca la puesta a punto definitiva tras los primeros kilómetros.

Neumáticos: cuatro juegos en 9.000 km

Aquí es donde se disparan los costes. El propietario reconoce haber gastado ya cuatro juegos completos de neumáticos en tan solo 9.000 km, algo habitual en motos deportivas con conducción activa.

“Sorprende que gastas los neumáticos a la par siempre”, comenta, destacando el desgaste equilibrado entre ambos ejes.

Aunque no especifica el precio por juego, sabemos que montar neumáticos de calidad en una superbike no baja de 300 a 400 € por juego, lo que podría haber supuesto más de 1.200 € en neumáticos en solo un año.

Mantenimiento del primer año: precios detallados

Aunque realizó él mismo el mantenimiento, el usuario ha querido compartir los precios oficiales de los repuestos comprados directamente en BMW, sin aplicar los descuentos que él sí tiene:

  • Aceite (3,5L): 65,90 € (18,83 €/L)

  • Filtro de aceite: 16,05 €

  • Filtro de aire: 33,11 €

  • Pastillas delanteras: 158,32 € (79,16 € por pinza)

“La mano de obra no la cuento porque lo hago yo mismo. Cada uno puede hacerlo donde quiera”, señala con sentido práctico.

Problemas: frenos mal purgados desde nuevos

Aquí viene el único pero serio: desde nueva, la moto arrastraba un problema de purgado en los frenos que no se solucionó ni en la revisión ni en dos visitas adicionales al taller oficial.

“El recepcionista de BMW Triocar en Gijón no tiene ni puta idea de lo que habla. Contándome películas de que si fading…”, denuncia.

Cansado de la falta de soluciones, el propio usuario decidió purgar el sistema él mismo y solucionó el problema en apenas 10 segundos. Desde entonces, ningún otro fallo mecánico relevante.

Detalles que suman

Entre las curiosidades positivas, destaca que la cadena solo ha necesitado tensarse 2 mm gracias a un mantenimiento meticuloso: limpieza con WD40 y engrase con grasa específica de Würth.

También aclara que el mantenimiento lo ha hecho antes de los 10.000 km o un año, como recomienda BMW.


¿Es prohibitivo tener una BMW S 1000 RR?

Según el propio motero: no. Más allá del coste de los neumáticos —algo esperable en una moto de este calibre—, el mantenimiento básico es asumible si se hace en casa, y los repuestos originales no son tan inalcanzables como algunos creen. Total, se ha gastado 1.641,38 euros.

Lo que sí se lleva un suspenso es el servicio técnico de algunos concesionarios, donde la falta de atención o conocimiento puede convertir una tontería en una odisea.

“Ahí tenéis lo ‘prohibitivo’ de las BMW…”, concluye con ironía.