Se compra un Shoei de Marc Márquez de AliExpress por 100 euros y se sorprende al ver que es falso
Las gangas en internet pueden ser muy tentadoras, pero no siempre son lo que parecen. Un supuesto casco Shoei réplica de Marc Márquez se está vendiendo por tan solo 102 euros, con un aparente descuento del 69% sobre su precio original. A simple vista, una oportunidad irresistible para los fans del piloto o los motoristas que buscan ahorrar. Sin embargo, la realidad es bien distinta.
Más de 146 unidades vendidas… pero con trampa
El producto ha logrado atraer a más de 146 compradores y acumula una puntuación media de 4,3 sobre 5. Sin embargo, basta con echar un vistazo a los comentarios para descubrir la verdad. Uno de los mensajes más directos lo deja claro:
“Casco no conforme, es una copia”.
Otros compradores advierten que la calidad del material no es la de un casco homologado, y que no es apto para circular en carretera ni para ofrecer ningún tipo de protección real en caso de accidente.
No es un casco, es un peligro
Aunque imite los colores, el diseño y el logotipo de la marca Shoei, este casco no cuenta con homologación oficial, ni cumple con los estándares de seguridad exigidos por la normativa europea (ECE). Se trata, en la práctica, de una réplica no autorizada que puede tener un uso únicamente decorativo.
Usar un casco así en moto no solo es un error: puede costarte la vida. Además, en caso de accidente, el seguro no cubrirá los daños si se demuestra que no llevabas un equipo homologado.
¿Cómo detectarlo?
El precio es una pista clara: un casco Shoei original, especialmente uno réplica de Márquez, ronda fácilmente los 500-700 euros. Si lo ves por 100 euros con un supuesto gran descuento, desconfía. También es clave fijarse en:
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Si incluye certificación ECE o DOT.
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Si el vendedor ofrece datos reales de la marca.
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Si hay opiniones que alertan de que es un producto no conforme.
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Si no se indica el país de fabricación o no hay garantía clara.
Solo valen para decoración
Este tipo de cascos pueden tener su sitio en una estantería o como objeto de coleccionismo, pero jamás deben usarse en circulación. Ni para trayectos cortos. Ni como “casco de repuesto”. No protegen, no cumplen la ley y ponen en riesgo tu vida.
Si ves uno de estos cascos a precio de saldo, huye. Porque en seguridad, lo barato puede salir muy, muy caro. Y ningún fanatismo por un piloto vale lo suficiente como para poner tu integridad en juego.
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