DGT

La DGT mete una multa a un motorista por algo que no te esperas: "Surrealista"

El radar

Una escena insólita ha llamado la atención en las redes sociales de los Mossos d’Esquadra. En su cuenta oficial de X (antes Twitter), el cuerpo policial catalán compartió la actuación contra un motorista que circulaba a solo 23 km/h en la carretera BP-1101, a la altura del municipio de Bruc (Barcelona). La vía, de dos carriles y con línea continua en casi todo su recorrido, tiene límites de velocidad de entre 50 y 70 km/h, lo que hace prácticamente imposible adelantar.

El resultado fue una larga retención de vehículos detrás de la moto, que avanzaba lentamente mientras su conductor avisaba al resto de usuarios sobre la presencia de un helicóptero de Tráfico, un comportamiento tan inusual como peligroso.

Circular demasiado despacio también es una infracción

El Reglamento General de Circulación, en su artículo 45, establece que ningún conductor debe circular a una velocidad anormalmente reducida si con ello entorpece la marcha normal de otros vehículos, salvo que exista una causa justificada, como tráfico intenso, condiciones meteorológicas adversas o una avería.

La DGT considera conducción excesivamente lenta aquella que se realiza a menos de la mitad del límite de velocidad permitido en la vía. En este caso, con una limitación de 70 km/h, conducir a 35 km/h o menos sin motivo es sancionable. El motorista del Bruc, que llegó a circular a 23 km/h, incurrió por tanto en una infracción leve, castigada con 100 euros de multa, aunque sin pérdida de puntos.

Avisar de radares o helicópteros, ¿es sancionable?

El gesto del motorista de avisar a otros conductores sobre la presencia de un helicóptero de Tráfico no está tipificado como infracción en sí mismo. Sin embargo, si para hacerlo se utilizan las luces de cruce o ráfagas de forma indebida, puede suponer una multa de 80 euros.

El objetivo de estas limitaciones, según la DGT, es mantener la fluidez del tráfico y evitar comportamientos que distraigan o generen peligro, incluso cuando el conductor crea estar “ayudando” a otros usuarios de la vía.

Nuevas cámaras de la DGT en Madrid: ahora detectan si pisas la línea continua

En paralelo a este tipo de infracciones, la DGT continúa reforzando la vigilancia en las carreteras. En Madrid, se han instalado nuevas cámaras cuya misión será detectar a los conductores que invaden la línea continua al incorporarse a las autovías.

Estas cámaras ya operan en cuatro puntos estratégicos:

  • A-1, kilómetro 15,9, cerca de Alcobendas.

  • A-2, kilómetro 11,8, próximo al Aeropuerto de Barajas.

  • A-42, kilómetro 16,9, tras pasar Getafe.

  • A-6, kilómetro 20,2, a la altura de Las Rozas.

El sistema funciona de manera sencilla: una cámara toma una imagen al acceder al carril y otra unos metros más adelante, comprobando si el vehículo ha pisado la línea continua. Si se confirma la infracción, la sanción será de 200 euros.

Seguridad vial por encima de todo

El caso del motorista del Bruc y la instalación de estas nuevas cámaras ponen de manifiesto la intención de las autoridades de controlar comportamientos de riesgo, tanto por exceso como por defecto de velocidad. Circular demasiado despacio, al igual que hacerlo demasiado rápido, rompe la fluidez del tráfico y puede generar situaciones peligrosas.

En definitiva, la lección es clara: respetar los límites no solo significa no superarlos, también implica no quedarse muy por debajo de ellos sin una razón justificada.