Da de baja el seguro de su moto en la Mutua y le dicen que no le reembolsarán el dinero "hasta en 5 años"
Lo que empezó como un seguro económico y con las coberturas esenciales se ha convertido, para algunos clientes de Mutua Madrileña, en una experiencia frustrante marcada por subidas inesperadas, pérdida de garantías y un proceso de devolución que, según denuncian, se alarga durante años. La queja de un asegurado, que asegura haber vivido una “muy mala experiencia”, ha encendido el debate sobre las políticas de renovación y reembolsos de la compañía.
Según relata este usuario, a finales de 2023 contrató un seguro de moto con asistencia en carretera por unos 150 euros al año, un precio competitivo dentro del segmento. El problema llegó un año después: al renovar en 2025, la póliza pasó a costar alrededor de 260 euros, un incremento de más de 100 euros sin que —según cuenta— existiera justificación clara o cambios relevantes en su situación como conductor.
La única vía para rebajar el importe fue renunciar a coberturas. “La única opción para reducir el precio fue quitar garantías”, explica. Aun así, incluso tras recortar servicios, terminó pagando 180 euros, es decir, treinta euros más que la póliza inicial y con menos protección que el primer año.
La situación se complicó aún más cuando vendió la moto. Tras comunicar la baja de la póliza, esperaba la devolución del importe correspondiente al periodo no disfrutado, algo habitual en la mayoría de aseguradoras cuando el contrato anual se cancela anticipadamente. Sin embargo, afirma que Mutua le informó de que la devolución podría demorarse hasta cinco años. “Una locura”, resume, al no entender por qué una cantidad pagada por adelantado debería quedar retenida durante tanto tiempo.
Las quejas relacionadas con renovaciones automáticas, subidas de precio y dificultades en los reembolsos no son nuevas en el sector, pero casos como este vuelven a poner el foco en la transparencia de las aseguradoras y en la necesidad de que el cliente comprenda con claridad las condiciones de contratación, renovación y cancelación antes de firmar.
Mutua Madrileña no ha respondido públicamente a esta queja concreta, pero la experiencia narrada refleja un escenario cada vez más habitual: pólizas que suben de precio sin previo aviso, reducciones en las coberturas para mantener costes y procesos administrativos que algunos clientes consideran excesivamente lentos. Un recordatorio, dicen los afectados, de que conviene revisar cada año las condiciones y comparar alternativas antes de renovar cualquier seguro.