Un mecánico se queja del "quilombo" que es cambiar el aceite de una Voge: "Esto pasa cuando el ingeniero se aburre"
“Esto es lo que pasa cuando un ingeniero está completamente aburrido”. Con esta frase cargada de ironía, un mecánico de Allendesgarage resumía su experiencia revisando una Voge 650 DS. Lo que parecía una tarea de rutina —cambiar el aceite del motor— se convirtió en una clase práctica de paciencia, malabares y resignación.
Y no es para menos. En esta trail media de origen chino, el sistema de drenaje del aceite es todo menos convencional. No hablamos de un simple tapón y una bandeja. No. Aquí hay dos drenajes, un sistema con grifo, un cárter ubicado en la parte superior del motor y una mecánica que desafía la lógica básica de la gravedad. En resumen: un auténtico “quilombo”.
¿Dónde está el aceite? En lo alto, por supuesto
El problema principal está en el diseño del motor, donde el cárter —esa pieza que normalmente va abajo y recoge el aceite— está situado arriba. Sí, arriba. Como si alguien hubiera decidido reinventar la física solo por deporte. Esto obliga a un drenaje meticuloso, asegurándose de que salga todo el aceite viejo sin dejar burbujas de aire ni charcos ocultos.
Pero aquí no termina el show: una vez drenado (si es que puedes hacerlo sin manchar absolutamente todo), viene el purgado. Como el aceite entra desde abajo y tiene que subir al cárter superior, si entra aire en el proceso, adiós presión de aceite. Y eso, en un motor monocilíndrico de 650 cc, puede terminar muy mal.
¿Y si solo quiero hacer el mantenimiento básico? Mala suerte
Esta situación, documentada en vídeo por Allendesgarage, demuestra que no todos los problemas de una moto están en la carretera. A veces, el mayor reto está en el taller, intentando entender qué quería lograr el diseñador del motor cuando trazó los conductos de lubricación. ¿Innovación? ¿Un error de cálculo? ¿Un castigo al mecánico?
Sea lo que sea, cambiar el aceite en una Voge 650 DS requiere más preparación que un examen final de termodinámica.
Una buena moto… con ideas raras
Lo curioso es que la Voge 650 DS no es mala moto. Ofrece una buena relación calidad-precio, es cómoda, viene bien equipada para viajes largos y su comportamiento en carretera está más que aprobado. Pero con decisiones como esta, la experiencia posventa puede volverse un pequeño infierno técnico.
Y eso, en un segmento trail donde muchos usuarios hacen el mantenimiento en casa o en talleres pequeños, puede marcar la diferencia.
Mecánica absurda, frustración real
Así que ya sabes: si tienes una Voge 650 DS y toca cambio de aceite, resérvate un par de horas, ponte ropa vieja y ten paciencia. Porque vas a necesitarla. Y si vas al taller, no te extrañe que el mecánico te mire con cara de “otra vez esta”.