Se compra la Yamaha R7 limitada con el carnet A2 y acaba en el desguace: "No es para cualquiera"
Una Yamaha R7, limitada para el carnet A2 y con jugosos extras como un escape SC Project, ha entrado recientemente en las instalaciones de Desguaces Motocoche. Tras un accidente en carretera y un fuerte golpe contra un guardarraíl, la moto terminó con el chasis doblado y sin posibilidad de reparación.
Para muchos recién estrenados en el carnet A2, la Yamaha R7 es ese sueño intermedio entre lo accesible y lo aspiracional. Una deportiva con alma callejera, que monta el motor CP2 de la MT-07 con 74 caballos, pero que gana en estética y sensaciones gracias a un chasis de tipo R y una parte ciclo muy por encima de lo habitual en su segmento.
La unidad que ha llegado a Desguaces Motocoche reunía todos esos ingredientes y más. Limitada para A2, permitía a su propietario disfrutar desde el primer día de una deportiva de verdad, sin necesidad de esperar a subir de carnet. Además, esta unidad equipaba una horquilla invertida totalmente regulable, lo que garantiza un comportamiento deportivo tanto en curvas lentas como en tramos rápidos.
Una deportiva bien calzada... y con personalidad
Otro detalle llamativo es el calzado: montaba neumáticos Bridgestone, conocidos por su buen agarre en todo tipo de condiciones, lo que la convertía en una compañera fiable tanto para uso diario como para alguna que otra escapada al circuito.
Pero si algo llamaba la atención a simple vista (y oído), era su escape SC Project, un extra no precisamente barato y que le aportaba una estética más agresiva y un sonido rotundo, muy distinto al de serie. Un detalle que demuestra el mimo con el que fue personalizada esta unidad.
El accidente que la llevó al desguace
Lamentablemente, esta Yamaha R7 tuvo un destino inesperado. Según ha trascendido, sufrió una caída en carretera y acabó golpeando un guardarraíl con fuerza. El resultado fue un chasis doblado, un daño estructural que, en este tipo de motos, significa casi siempre el fin de su vida útil en la calle.
Por ello, la moto ha terminado en Desguaces Motocoche, donde seguramente muchas de sus piezas podrán tener una segunda vida en otras máquinas. Aunque ya no vuelva a rugir como antes, sus componentes seguirán rodando.