Triumph da un salto de calidad y de deportividad con su Street Triple: un mito para el A2

Triumph Street Triple 765

La Triumph Street Triple 765 RX no es una Street Triple más. Es una edición especial concebida con una idea muy clara: llevar el concepto naked de media cilindrada a un terreno mucho más deportivo, casi de moto de circuito matriculable. Y lo hace sin medias tintas, apoyándose en una parte ciclo de primer nivel, una posición de conducción radical y un equipamiento que la coloca en un lugar propio dentro del mercado.

Con un precio de 14.695 euros, la Street Triple 765 RX se sitúa por encima de las versiones R (10.795 €) y RS (13.595 €), pero por debajo de ediciones aún más exclusivas como la Moto2 Edition. Aun así, es la más deportiva de toda la saga, y también una de las naked medias más extremas que se pueden comprar hoy.

Una naked con alma de deportiva

La clave de la Street Triple 765 RX está en lo que se ve… y en lo que se siente al subirte. Triumph ha apostado por semi-manillares, algo prácticamente inexistente en este segmento, que obligan al piloto a cargar más peso sobre el tren delantero y adoptar una posición claramente racing. No es un simple detalle estético: cambia por completo la experiencia de conducción.

Triumph Street Triple 765

A esto se suma una parte ciclo firmada por Öhlins de principio a fin. Delante monta una horquilla invertida Öhlins NIX30, totalmente ajustable, con 115 mm de recorrido, mientras que detrás encontramos el monoamortiguador Öhlins STX40, también completamente regulable, con 131,2 mm de recorrido. Es un conjunto pensado para quienes buscan precisión, tacto y estabilidad a alto ritmo, tanto en carretera como en circuito.

La geometría también se ha ajustado, lo que se traduce en una altura de asiento de 839 mm y un peso en orden de marcha de 188 kg, cifras que refuerzan su carácter deportivo sin llegar a ser extrema en el día a día… aunque claramente no es una moto pensada para pasear.

Diseño exclusivo y producción limitada

La Triumph Street Triple 765 RX solo estará disponible durante 2026, y se reconoce de inmediato por su decoración específica en Matt Aluminium Silver, el subchasis en Diablo Red y las llantas en el mismo tono. A esto se suman detalles exclusivos como la tija mecanizada, el logotipo RX grabado a láser en el silenciador y un asiento específico.

Es una moto que no busca discreción. Su estética deja claro que estamos ante una Street Triple especial, pensada para un público muy concreto.

La base RS: motor y frenos de referencia

Bajo toda esa exclusividad late la base de la Street Triple 765 RS, una de las naked más equilibradas y efectivas del mercado. El motor es el conocido tricilíndrico de 765 cc, derivado directamente del que Triumph utiliza en el Mundial de Moto2, con 130 CV a 12.000 rpm y 80 Nm de par a 9.500 rpm. Un propulsor lleno arriba, preciso, con carácter y una respuesta que invita a estirar cada marcha.

En el apartado de frenos no hay concesiones. La RX monta pinzas Brembo Stylema monobloque radiales de cuatro pistones con discos delanteros de 310 mm, accionadas por una bomba Brembo MCS regulable. Detrás, una pinza Brembo monopistón con disco de 220 mm. El sistema de frenada combinada mejora la estabilidad y reduce distancias, algo clave cuando se rueda fuerte.

Triumph Street Triple 765

Los Pirelli Diablo Supercorsa SP V3 confirman que esta moto nace con un enfoque claramente superdeportivo, todo ello unido a un chasis de doble viga de aluminio, subchasis de dos piezas y un basculante tipo ala de gaviota.

Electrónica de alto nivel, pensada también para circuito

La electrónica está a la altura de lo que se espera de una RX. Incorpora IMU para gestionar ABS en curva, control de tracción en curva (con 4 niveles y desconectable) y sistema anti-wheelie. El piloto dispone de cinco modos de conducción: Road, Rain (limitado a 100 CV), Sport, Rider configurable y un modo Track específico para circuito.

Toda la información se visualiza en una pantalla TFT de 5 pulgadas, con navegación mediante joystick de cinco posiciones. Incluye cronómetro de vueltas, iluminación full LED con DRL, intermitentes auto-cancelables, quickshifter bidireccional Triumph Shift Assist y embrague asistido antirrebote. Opcionalmente, puede equipar el sistema MyTriumph para conectividad con el smartphone.

¿Tiene rivales reales?

Aquí es donde la Triumph Street Triple 765 RX juega sola. En esta cilindrada y con semi-manillares, prácticamente no tiene rivales directas. Se mueve en un escalón más radical que modelos como la Yamaha MT-09 SP, Aprilia Tuono 660 Factory, Kawasaki Z900 SE, KTM 990 Duke R o Ducati Monster SP. Incluso frente a motos como la Ducati Streetfighter V2 S, la RX ofrece un enfoque diferente: menos potencia, pero más ligereza y precisión.

Una Street Triple para motoristas muy concretos

La Triumph Street Triple 765 RX no busca ser la más cómoda ni la más polivalente. Busca ser la más deportiva, la que más se acerca a una RR sin carenados dentro del mundo naked. Es una moto para quien valora el tacto de suspensiones, la posición de ataque y la sensación de control absoluto por encima de todo.

Una edición especial con personalidad propia, que demuestra hasta dónde puede llegar la saga Street Triple cuando Triumph decide no ponerse límites.