Reserva una Voge en un concesionario de Barcelona y se tira 10 meses de espera: "A día de hoy no hay fecha clara"
La paciencia de un cliente ha llegado al límite tras una experiencia frustrante con un concesionario oficial de Voge en Barcelona, donde hace nueve meses reservó una motocicleta que, a día de hoy, no ha recibido ni tiene fecha clara de entrega. Según denuncia públicamente, no solo no ha llegado la moto, sino que tampoco ha recibido atención adecuada por parte del establecimiento.
“Hace 9 meses reservé una moto, y hasta el día de hoy no he recibido la moto ni una fecha clara de entrega. He contactado varias veces expresando mi descontento y solicitando la devolución del dinero, pero no obtengo ninguna respuesta”, expone el afectado en una reseña en plataformas públicas.
Silencio y desatención tras la reserva
La situación se agrava por el reiterado silencio del concesionario, pese a los intentos del cliente de obtener información o, en su defecto, recuperar el dinero que adelantó para asegurar la reserva del vehículo. Según relata, la falta de compromiso y de profesionalidad ha sido constante desde que realizó la operación.
“Una total falta de seriedad, compromiso y atención al cliente. No recomiendo este lugar a nadie que quiera un trato profesional y responsable”, concluye con dureza el cliente.
Respuesta tardía e inconcreta del concesionario
Por su parte, el concesionario ha contestado a través del mismo canal donde fue publicada la queja, limitándose a una respuesta genérica y sin plazos concretos:
“Sentimos mucho lo ocurrido y entendemos completamente tu malestar. Vamos a investigar lo sucedido y nos pondremos en contacto contigo a la mayor brevedad para ofrecerte una solución.”
Sin embargo, no se menciona ni el motivo del retraso ni se aclara cuándo se producirá la entrega, ni si existe intención de devolver el importe adelantado.
Un caso más que pone en entredicho la imagen de marca
Casos como este no solo dañan la reputación del concesionario implicado, sino que también afectan indirectamente a la percepción de la marca Voge en España, que intenta posicionarse en un mercado cada vez más competitivo. La falta de transparencia, comunicación y profesionalismo en puntos de venta oficiales puede suponer un lastre para los fabricantes si no se toman medidas correctivas.
Este episodio es un ejemplo más de por qué muchos consumidores demandan más garantías en la compra de vehículos, especialmente cuando los pagos por reserva no están suficientemente respaldados por compromisos de entrega formales.